Kono Subarashii Sekai ni Shukufuku wo

En Kono Subarashii Sekai ni Shukufuku wo!, la vida de Kazuma Satou da un giro tan absurdo como divertido tras morir de la forma menos heroica posible: creyendo que salvaba a alguien de ser atropellado… por un tractor que ni siquiera lo iba a tocar. Así arranca esta hilarante parodia isekai que, desde el primer momento, se burla de todos los cliches del genero. En lugar de ascender al cielo o reencarnar como algo chetadisimo, Kazuma toma una tercera opcion: arrastrar consigo a Aqua, una diosa tan bella como inutil, a un mundo de fantasia que no tiene ni Wi-Fi ni sentido comun.

Detras de este caos tan meticulosamente orquestado se encuentra el duo creativo compuesto por Akatsuki Natsume en la historia y Watari Masahito en el arte. Juntos nos traen una comedia visualmente encantadora y narrativamente caotica, donde lo epico convive con lo ridiculo. Porque claro, si vas a formar un grupo para derrotar al Rey Demonio, lo logico es aliarte con una archimaga que solo lanza un hechizo al dia y una caballera masoquista que no acierta ni un espadazo. Pero aqui, lo logico brilla por su ausencia.

Kono Subarashii Sekai ni Shukufuku wo! no es solo una historia sobre magia y aventuras. Es una critica graciosa y autoconsciente a todos esos mundos de fantasia en los que todo funciona perfecto… excepto cuando no. Kazuma no quiere salvar el mundo, quiere calefaccion, una cama comoda y no morirse de hambre. Su grupo, disfuncional hasta el tuetano, es una oda a la amistad accidental y al fracaso glorioso.

La fuerza de esta historia esta en sus momentos absurdos: dioses que hacen berrinches, misiones que salen mal desde el inicio, enemigos que son mas racionales que los heroes, y un protagonista que, lejos de ser el tipico heroe valiente, es tan cobarde y oportunista como cualquier mortal promedio. Y ahi esta su encanto. Uno se encariña con Kazuma no porque sea fuerte o noble, sino porque esta igual de confundido que nosotros.

En definitiva, Kono Subarashii Sekai ni Shukufuku wo! es una comedia brillante que mezcla magia, ironia y un monton de explosiones cortesía de Megumin. Es el tipo de que no solo se burla del genero isekai, sino que lo mejora al humanizar a sus personajes, haciendo de sus fracasos una verdadera fiesta. Si buscas reirte, sorprenderte y, de paso, reir un poco mas, esta serie es tu proxima parada.