Fairy Tail 100 Years Quest

En Fairy Tail 100 Years Quest, la calma después de la tormenta dura menos que un dulce en la mesa del gremio. Un año ha pasado desde que Natsu Dragneel, Lucy Heartfilia, Gray Fullbuster, Erza Scarlet, Wendy Marvell y los infaltables exceeds Happy y Charlés lograran lo impensable: derrotar a Acnologia y Zeref. Pero, como buen grupo que no sabe estarse quieto, la paz no es opción. Ahora, se lanzan a la mítica misión que lleva más de un siglo esperando ser completada: la temida 100 Years Quest. Y no es cualquier encargo… consiste en sellar a los Cinco Dioses Dragón, criaturas tan absurdamente poderosas que, si se descontrolan, podrían borrar el mundo como quien sopla una vela.

La misión los lleva hasta Guiltina, un continente que parece diseñado por alguien que odia la seguridad y el turismo. Entre parajes salvajes, magia que no sigue las reglas y enemigos que no creen en la palabra “misericordia”, el equipo pronto se da cuenta de que esta aventura no es solo peligrosa, es directamente suicida. Y como si eso no fuera suficiente, aparece Diabolos, un gremio oscuro con una fijación peligrosa: cazar y absorber el poder de los Dioses Dragón. Sus miembros no solo son fuertes, sino también lo suficientemente temerarios como para poner en jaque incluso a los magos más locos de Fairy Tail.

Pero la amenaza no solo viene del exterior. En el propio gremio, una recién llegada llamada Touka parece ser la típica maga entusiasta, dulce y algo torpe… hasta que ciertas actitudes levantan sospechas. Detrás de su sonrisa, oculta un secreto que podría poner en jaque no solo la misión, sino el destino de todo el equipo. Lo que parecía un viaje directo hacia lo desconocido, ahora se convierte en una carrera contra el tiempo, donde confiar en la persona equivocada podría costarles más que la vida.

Hiro Mashima, creador de la saga original, junto con Atsuo Ueda a cargo del arte, logran que Fairy Tail 100 Years Quest conserve la esencia del que conquistó a millones: combates exagerados, magia creativa y esa mezcla perfecta entre humor ridículo y momentos épicos. Aquí, cada batalla contra un Dios Dragón es más que un simple enfrentamiento de poder: son choques de ideales, donde el peso de la historia y las decisiones pasadas caen sobre los hombros de nuestros protagonistas. Y si algo queda claro, es que en Fairy Tail, la familia no siempre es de sangre, pero sí de combate y heridas compartidas.

En el fondo, esta no es solo una misión pendiente, es la excusa perfecta para que el equipo más alocado del gremio siga haciendo lo que mejor sabe: meterse en problemas imposibles y salir de ellos con una mezcla de pura fuerza bruta, magia imposible y esa fe irracional en que “juntos podemos”. Porque, al final del dia, Fairy Tail 100 Years Quest no es solo sobre dragones, gremios oscuros o hechizos colosales, sino sobre cómo, incluso después de vencer a los peores enemigos, siempre habrá una nueva aventura esperando… y sí, probablemente también un desastre nuevo que apagar.